El estuario

El estuario del Amazonas

La región costera del Amazonas se extiende desde el río Oyapoque, en el límite entre Brasil y la Guyana Francesa, hasta el sudeste de la bahía Marajó. La mayor parte de esta área no está hidrográficamente en la Cuenca Amazónica, aunque desde una perspectiva de gestión de humedales, debería de ser considerada, ya que está ecológicamente conectada a ella. El área costera en donde desemboca el Amazonas se caracteriza por ser lodosa, ya que recibe una enorme cantidad de sedimentos.

Alrededor de esta desembocadura, se puede encontrar una amplia zona de humedales, conformada por un complejo laberinto de archipiélagos, una isla gigante, una enorme bahía de agua dulce y bosques de marea. La presencia de bagres de agua dulce que han migrado hasta esta zona dan fe de esta conexión ecológica con el sistema principal del río. Esta zona también representa el área de encuentro de las aguas del Amazonas y el Atlántico. En esta lucha entre el agua dulce y la salada, el agua dulce domina ampliamente la ecología de esta zona. Esto, primeramente, porque el agua y los sedimentos descargados por el río Amazonas hacia el Atlántico forman una barrera contra el agua marina, pero también porque las sabanas de humedales de la costa se alimentan del agua de lluvia. Sin embargo, la influencia marina también es importante, y se puede detectar a partir de la presencia de manglares cerca al océano.

La gigantesca isla Marajó adiciona cerca de 1,000 kilómetros (km) de línea de costa a estos humedales orientales, y su delta interno forma un laberinto de paisajes ribereños y de bosques. Aunque el lado de la isla Marajó que da al Océano Atlántico incluye sólo cerca de la tercera parte de la costa norte de esta isla gigante, también se caracteriza por tener enormes cantidades de lodo y una extensa área de manglares, pero también dunas de arena y extensos matorrales de bambú. Estas dunas de arena contrastan fuertemente con los llanos lodosos de la desembocadura del Amazonas. Los incendios anuales generados por los criadores de ganado vacuno han modificado radicalmente la costa nororiental de la isla Marajó, y probablemente los matorrales de bambú son consecuencia del extensivo uso de fuego en la zona. Las aguas cercanas al litoral nororiental de la isla representan hábitats importantes para la crianza comercial de bagres.

Conservando la Cuenca Amazónica Aguas Amazonicas

Los planificadores ambientales han ignorado la desembocadura del río Amazonas en sus propuestas de gestión del territorio, dado que se conoce muy poco acerca de ella. La costa norte, en la región de Amapá, se encuentra relativamente poco desarrollada en términos económicos, por lo que la mayoría de bosques de manglares que ahí se encuentran permanecen en buenas condiciones y poco o nulamente intervenidos, siendo utilizados principalmente en la actividad cangrejera, y muy poco para la pesca comercial, que ocurre lejos de la costa. Sin embargo, hacia el este de las sabanas de Amapá se desarrollan actividades de crianza de ganado vacuno, lo que sí ha generado cierto impacto en la costa en la medida en que los animales invaden algunos de los arroyos generados por las mareas. Por otro lado, aún hay grandes e impresionantes extensiones de bosques de marea de agua dulce en algunas de las islas y a lo largo de la costa que vienen siendo amenazados por la deforestación ocurrida tierra adentro y la quema de las sabanas. En función a lo expuesto, y considerando que la población asentada en la zona de la desembocadura es reducida -probablemente debido a las dificultades que existen para navegar dada la gran cantidad de lodo- y que esta zona actualmente no se encuentra protegida de ninguna forma ni en ninguna extensión, podría ser ideal el establecimiento de una pequeña reserva que proteja la gran extensión oriental de los bosques de llanura de inundación, y los humedales en general.


 

EL ESTUARIO Y LA COSTA

Bahía de Marajó
Costa de Amapá
El estuario
Isla Marajó