Costa de Amapá

Al norte de la desembocadura del río Amazonas se encuentra Amapá, uno de los territorios de humedales más grandes de Brasil. Amapá tiene dos grandes ríos, el Araguari y el Oyapoque, este último compartido por Brasil y la Guyana Francesa. Ambos ríos tienen menos de 400 km de largo y sus cabeceras se encuentran sobre el macizo Guayanés. La mayor parte de Amapá se encuentra aún cubierta de bosques y se encuentran grandes áreas de sabanas en el lado oriental. La costa de Amapá es una de las zonas más lluviosas de la región amazónica. Los totales anuales de precipitación están usualmente por encima de los 3,000 milímetros (mm).

El Araguari fue el primer río relativamente grande que fue represado. La represa Coaracy Nunes fue construida para suministrar energía a la industria multinacional local de manganeso y a Macapá, la capital del estado de Amapá. El Araguari fue embalsado en 1972, los impactos ambientales asociados aún deben de ser estudiados científicamente. Los pescadores locales no han reportado mayores efectos sobre su actividad, y las especies migratorias aún son encontradas tanto por encima, como por debajo de la represa.

Los depósitos de manganeso de la Serra do Navio, en la zona de la cabecera de cuenca del río Araguari fueron sobreexplotados, y como consecuencia de ello las operaciones mineras desarrolladas en la década de 1980 se agotaron hacia fines de la década de 1990. Por otro lado, la minería aurífera en la cuenca alta del Araguari fue bastante intensa entre principios de la década de 1980 y mediados de la década de 90. Desde mediados de la década de 1990 la minería aurífera en Amapá, como en casi toda la Amazonía brasileña, ha declinado. Los criadores de ganado vacuno están ahora colonizando los bosques ribereños que se ubican por debajo de la represa, y por tanto, la deforestación viene incrementándose.

Rodeada hacia el sur por el bajo Araguari, y hacia el oeste por el Cabo Norte, la región de los lagos Piratuba es una inmensa área de pantanos de aguas poco profundas, inundada principalmente por agua de lluvia local, pero también por las mareas en sus límites oriental y sur. Cerca de la mitad de esta región de humedales es una unidad de conservación federal. Con sus grandes y abiertos cuerpos de agua y sus islas cubiertas de vegetación, la región de los lagos Piratuba es un reminiscente del Pantanal, en la zona central de Brasil. La reserva Piratuba es rica en vida acuática, y acoge una gran variedad de aves limícolas, como la garceta o la ibis. En los lagos se pesca comercialmente el pavón o tucunaré (Cichla), que abastecen el mercado de Macapá. La región de los lagos de Piratuba no se ha desarrollado para el turismo, a pesar de contar con espacios abiertos en donde habitan una gran cantidad de aves, como ocurre en Pantanal. Los criadores de ganado vacuno pastan sus animales sobre la periferia de la región de los lagos Piratuba, aunque algunas personas viven al interior de la reserva. Actualmente, la crianza de ganado vacuno se presenta como la principal amenaza a la región de los lagos Piratuba.

Actualmente, Amapá representa un espacio atractivo para plantar árboles a gran escala en la cuenca amazónica. Las regiones de sabana de matorral, entre los alrededores de Macapá y más allá del río Araguari, han sido despejadas para plantar eucaliptos y pinos. Los bosques de pantanos dominados por el buriti o aguaje (Mauritia flexuosa), forman frecuentemente largos corredores de palma, pero éstos están siendo destruidos rápidamente por el desarrollo de las plantaciones. Las cabeceras de los pequeños ríos costeros se originan en estas tierras arbustivas.