La Red Ciencia Ciudadana para la Amazonía está creciendo y las nuevas adhesiones son resultado de articulaciones en diferentes niveles. Hasta febrero, formaban parte de la Red organizaciones de Brasil, Colombia, Ecuador, Perú, Estados Unidos y Francia. En Brasil participan Ecoporé, Instituto de Desenvolvimento Sustentável Mamirauá – IDSM, Projeto Saúde e Alegria – PSA, Sapopema, y Universidade Federal de Rondônia – UNIR. Tienen sede en Colombia, el Instituto Sinchi y en Ecuador, la Universidad San Francisco de Quito – USFQ. En Perú, el Instituto del Bien Común – IBC, IIAP – Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana – IIAP, ProNaturaleza, la Sociedad Zoológica de Frankfurt y la Universidad de Ingeniería y Tecnología – UTEC. Cornell Lab of Ornithology – CLO, Earth Innovation Institute – EEI, Florida International University – FIU, y Wildlife Conservation Society tienen sede central en Estados Unidos, mientras que el Instituto de Investigación para el Desarrollo – IRD, que lidera el Proyecto Amazon Fish, tiene su sede central en Francia..
En marzo 2020 se unieron a la Red el Instituto Fronteiras (Acre, Brasil), el Movimiento de Pescadores y Pescadoras del Bajo Amazonas – Mopebam (Pará, Brasil) y CIBIOMA – Centro de Investigación en Biodiversidad y Medio Ambiente (Bolivia). A título individual, se nos unieron Natalia Piland, Sebastián Heilpern y Vanessa Eyng.
Natalia Piland es ecóloga. Estudia las comunidades de aves y el involucramiento en el estudio de aves en ciudades amazónicas, y ha participado como consultora desde las etapas tempranas del proyecto. Sebastián Heilpern, PhD, es ecólogo y científico de la sostenibilidad enfocado en comprender las causas y las consecuencias del cambio de la biodiversidad, en particular en lo que respecta a los ecosistemas de agua dulce, la pesca y la seguridad alimentaria. Vanessa Eyng tiene una formación en comunicación social con énfasis en periodismo. Ha trabajado durante siete años en proyectos de conservación en la Amazonia brasileña y tiene amplia experiencia en comunicación estratégica, comunicación científica y en trabajo conjunto con comunidades locales.
Desde la Amazonía boliviana, en el departamento del Beni, se suma CIBIOMA, una unidad dependiente de la Universidad Autónoma del Beni “José Ballivián” (UABJB). Dedicada al estudio de la biodiversidad y el medio ambiente, CIBIOMA busca la producción científica, el mantenimiento del patrimonio natural y la educación ambiental a través de la generación, recopilación, sistematización, análisis y difusión de datos. CIBIOMA realiza trabajos de investigación, difusión y educación desarrollados a través de metodologías participativas bajo la premisa del desarrollo sustentable para la mejora de la calidad de vida de la población.
Cruzando hacia el suroeste de Brasil, tenemos al Instituto Fronteiras en el valle del río Juruá, en el estado de Acre. Su trabajo apunta a construir una red de cooperación con el fin de crear soluciones compartidas sostenibles e innovadoras para los problemas sociales y ambientales locales, centrándose en la ampliación de la autonomía de los pueblos indígenas y las comunidades tradicionales. El trabajo de Instituto Fronteiras reúne a comunidades nativas, universidades y otras instituciones públicas y privadas para establecer sinergias para proyectos dirigidos al desarrollo sostenible desde un punto de vista socioeconómico y ambiental, promoviendo la creación de redes de cooperación, la promoción de nuevas tecnologías sociales para el incremento del capital humano y social, la equidad social y ambiental y el uso sostenible de los recursos naturales.
Y desde Santarém, en el estado de Pará al norte de Brasil, el Movimiento de Pescadores y Pescadoras del Bajo Amazonas (Mopebam), se suma a la Red Ciencia Ciudadana para la Amazonía. Después de conocer el trabajo de la Red por intermedio de Sapopema, el Movimiento de Pescadores e investigadores de la Universidade Federal do Oeste do Pará están construyendo un acuerdo institucional para trabajar en la cuenca del bajo y medio río Tapajós. Los datos compartidos vía Ictio serán importantes para que los pescadores e investigadores comprendan mejor las actividades de pesquerías que ocurren en la región. Para Socorro Pena, de Sapopema, ese es un avance muy importante. “Esta alianza, a través de las Colonias, integrará no sólo el uso de la tecnología, con el app Ictio, sino también un proceso de fortalecimiento institucional, ya que ellos harán una línea de base de la actividad pesquera en asociación con estos investigadores. ¡Esta perspectiva motivó mucho a las comunidades!”, señala Socorro.
En abril se unió a la red el Instituto de Investigación para el Desarrollo (IRD por sus siglas en francés), una institución pública francesa adscrita al Ministerio de la Enseñanza Superior, de la Investigación y de la Innovación y al Ministerio de Europa y de Asuntos Exteriores. Se trata de un organismo pluridisciplinario reconocido a nivel internacional dedicado a la investigación, peritaje, capacitación e intercambio de conocimientos en colaboración con universidades, institutos públicos, empresas, y otros organismos internacionales. Sus investigaciones contribuyen a la toma de decisiones y políticas públicas mediante un ejercicio riguroso de la ciencia, procedente de una construcción social inclusiva y enfocado a contribuir a la agenda internacional de desarrollo.
¡Les damos una cálida bienvenida a las organizaciones y colegas que se sumaron a la red en estos últimos tres meses!