Colombia: gestión de humedales en un país anfibio

Colombia: gestión de humedales en un país anfibio
enero 17, 2022 AmazCitSci

Conservando la Cuenca Amazónica Aguas AmazonicasEn Colombia hay más de 48 mil humedales que representan cerca del 26 por ciento de su territorio continental. Fotografía: Región Amazonía colombiana-Carolina Obregón Sánchez.

Colombia es un país con más de 48 mil humedales que representan cerca del 26 por ciento de su territorio continental. Parte de su historia está ligada a estos ecosistemas que desde tiempos remotos han definido no solo la naturaleza anfibia de sus suelos, sino también la de pueblos indígenas, campesinos o afrodescendientes, es decir son culturas anfibias. No obstante, hoy el 24,2 por ciento de estos humedales está transformado por la ganadería, agricultura y deforestación, y por un proceso urbanístico y de construcción que durante décadas los ha desconocido: en grandes ciudades como Bogotá, por ejemplo, existían cerca de 50 mil hectáreas de humedal hace 60 años, de las cuales quedan 727 hectáreas debido, en parte, a que se han construido barrios enteros sobre ellos. 

Si bien este país cuenta con una Política Nacional de Humedales (de 2002) y diferentes normas, planes de manejo y proyectos que soportan la gestión de humedales, son varios los desafíos que se presentan para alcanzar un manejo adecuado de estos ecosistemas; la planificación a gran escala, visibilizar la estrecha relación humedales-actividades humanas o el fortalecimiento de la gobernanza en diferentes niveles, son algunos de ellos.  

Integrar otros enfoques

Los humedales son ecosistemas muy dinámicos que dependen de procesos naturales y antrópicos igualmente dinámicos: el clima, los niveles del agua en los ríos, el ciclo del agua, el estado de los bosques, de los suelos o de la biodiversidad, o el ser humano y sus actividades, son elementos que los definen. Hasta ahora, el estudio y la gestión de humedales en Colombia se hacía desde enfoques específicos (hídrico, hidrológico, biológico, ecológico, etc.) que desconocían esta dinámica. 

Si bien se ha avanzado en integrar diferentes enfoques tanto en la investigación como en la gestión de humedales, Sandra Vilardy, Doctora en ecología con amplia experiencia en ecología de humedales, asegura que es necesario fortalecer el entendimiento de estos ecosistemas desde sus diferentes dimensiones (biológica, ecológica, hídrica, hidrológica, etc.) y escalas (partiendo de las áreas locales hasta las regionales o transfronterizas), pero desde una mirada integral. 

“No hay asuntos o temas menores. Algunos enfoques son puramente hídricos, otros hidrológicos, otros ecológicos, y todos son claves para comprender cómo funciona un humedal; pero es necesario empezar a observarlos en una escala mayor para así prever los posibles conflictos que se pueden generar por una planificación que excluye algunos de ellos”, afirma Wilson Ramírez, coordinador del Programa Gestión Territorial de la Biodiversidad del Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt (desde el cual se han adelantado procesos de restauración de áreas de humedal de este país). En este país hay experiencias en distintas áreas de humedal, como el Magdalena-Cauca o La Mojana, en las que la gestión ha ignorado, por ejemplo, el carácter socioecológico de los humedales, es decir la relación entre los recursos naturales y las poblaciones humanas, generando conflictos por el uso del agua o de los suelos o de los recursos pesqueros, explica Wilson Ramírez. 

Los humedales son sistemas socioecológicos en los que la relación entorno natural-poblaciones humanas es determinante: estos ecosistemas proveen los alimentos para el autoconsumo o la madera para construir las viviendas o sirven como vías naturales de transporte, también definen las formas de vida y el bienestar de muchas poblaciones humanas, a la vez que son transformados por estas. Ha sido y seguirá siendo así. De ahí que integrar otros enfoques (como las Soluciones Basadas en la Naturaleza) que tengan en cuenta esta relación, además de la mirada multidimensional y multiescalar, es un desafío en la gestión de humedales. 

Promover el conocimiento 

En Colombia los humedales son un ecosistema poco conocido, de hecho, estos se entienden como “simples ecosistemas naturales” o son vistos como “áreas inundadas que obstaculizan el desarrollo”. Sandra Vilardy explica que el conocimiento técnico-científico sobre estos ecosistemas suele “quedar dentro del corazón de las instituciones” en informes técnicos o artículos científicos que pocos conocen, cuando uno de los mayores desafíos es que ese conocimiento trascienda no solo al ciudadano común sino, incluso y necesario, a aquellas entidades y personas que se encargan de la planificación y del ordenamiento ambiental o territorial. En Colombia hay cada vez más personas, desde diferentes disciplinas, interesadas en aportar soluciones que contemplen la complejidad de las áreas de humedal, así como las transformaciones que se han dado y se están dando debido a asuntos como el cambio climático, explica la investigadora, quien agrega que “el mayor desafío es que el tiempo nos está respirando en la nuca y es urgente una nueva conciencia sobre lo que está ocurriendo”. 

Lo que hizo la IPBES, recoger la información mundial sobre biodiversidad y servicios ecosistémicos y reunirla y analizarla para presentar un panorama actual es un buen ejemplo de cómo el conocimiento se puede hilar y explicar para que sea útil, afirma Vilardy. Pero si se trata de llegar a quienes toman las decisiones sobre políticas ambientales, económicas, de desarrollo u ordenamiento del territorio (gobiernos nacionales, regionales o locales, por ejemplo) o a quienes implementan las acciones que se derivan de dichas políticas (técnicos, sectores industriales o comunidades con quienes se realizan intervenciones), este es un ejercicio que además puede y debe enriquecerse con la transferencia de conocimientos y la instalación de capacidades técnicas. Para llegar al ciudadano común actualmente hay muchas herramientas para difundir el conocimiento sobre los humedales del país. Las redes sociales o los medios de comunicación digitales, por ejemplo, son plataformas a través de las cuales se puede contar la historia de los humedales y la forma en la que han incidido en el carácter anfibio del país, sus transformaciones y las presiones que enfrentan debido a las actividades humanas.

Conservando la Cuenca Amazónica Aguas AmazonicasLos desafíos en la gestión de humedales en Colombia guardan similitudes con los de otros países: abordar los humedales a gran escala, fortalecer la gobernanza en diferentes niveles o una mayor compresión del agua y sus ciclos naturales son algunos de ellos. Fotografía: Walter Wust.

Fortalecer la gobernanza 

“Hay desafío en la gestión actual de humedales, que es un desafío ético, y es entender la dignidad de la gente que depende de sus humedales. Desde las grandes ciudades del país no nos damos cuenta cuánto dependen de estos ecosistemas las comunidades rurales para su bienestar”, dice Sandra Vilardy. 

En este sentido, Wilson Ramírez afirma que la gestión de humedales debe abordarse de una manera transversal en la que se fortalezca la gobernanza especialmente de esas comunidades; “la gestión de humedales implica una responsabilidad transversal y compartida por los diferentes actores del territorio, desde el nivel nacional hasta el local”, explica. Aunque hay un nivel gubernamental que es clave en esa gestión, también hay una responsabilidad del sector académico para apoyar desde la ciencia la toma de decisiones, a través de información que permita identificar los impactos (positivos y negativos) sobre las áreas de humedal y proyectar posibles impactos futuros y las posibles transformaciones y adaptaciones que puedan ocurrir, y hay una responsabilidad de los sectores industriales y sus actividades, y hay una responsabilidad individual en cuanto a los hábitos de consumo (finalmente todos hacemos uso directo o indirecto de estos ecosistemas), y hay una responsabilidad de las comunidades locales para ejercer su gobernanza. 

El desafío es entender que esta es una responsabilidad compartida en la que cada quien, desde su rol, apoya un modelo de gestión compartida, teniendo en cuenta la importancia de los humedales para el buen vivir de esas comunidades. 

Una agenda común

Conservando la Cuenca Amazónica Aguas AmazonicasNo obstante ser uno de los ecosistemas más productivos del mundo, los humedales con también uno de los más transformados por las actividades humanas. Fotografía: Región La Mojana colombiana-Carolina Obregón Sánchez.

Los humedales están entre los ecosistemas más productivos del mundo, pero también entre los más amenazados del planeta, por eso tanto Sandra Vilardy como Wilson Ramírez coinciden en afirmar que la importancia de consolidar una agenda para su gestión es un desafío al que no se le debe dar más espera. Esto significa fortalecer, coordinar y armonizar las diferentes agendas de gestión de estos ecosistemas para consolidar y potenciar una agenda nacional (y global) que impulse una gestión que integre los desafíos que se mencionaron anteriormente: la investigación científica, la divulgación de conocimiento, la transferencia de capacidades, la gobernanza en diferentes niveles. Pero, afirman los especialistas, es una agenda a largo plazo que debe concentrarse en las soluciones a los problemas actuales como la adaptación y mitigación del cambio climático, la contaminación de las aguas que afecta la productividad pesquera y agrícola, la rehabilitación y conservación de los humedales o la pérdida de la biodiversidad. 

Las afectaciones de los humedales a gran escala pueden explicarse en que todo lo que ocurra a miles de kilómetros de distancia jalona presiones que hoy son evidentes. No obstante, las soluciones que se propongan e implementen, no solo a miles de kilómetros de distancia sino de una manera integral, también pueden jalonar la protección, conservación, gestión y buen manejo de estos ecosistemas en Colombia, que es un país anfibio. 

Escrito por Carolina Obregón

Fuentes consultadas: 

-Sandra Vilardy Quiroga, Bióloga Marina, Doctora en ecología y medio ambiente, e investigadora en temas relacionados con el análisis de sistemas socioecológicos. Actualmente es la Directora de Parques Cómo Vamos. 
-Wilson Ramírez Hernández, Doctor en Ecología con énfasis en ecología de la restauración. Es autor principal del capítulo de restauración de la Plataforma Intergubernamental de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos de las Naciones Unidas, y asesoró el documento conceptual del Plan Nacional de Restauración del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia.
Humedales para la gente. Sandra Liliana Mosquera, Olga Nieto y Carlos Tapia Caicedo. Instituto de Investigación de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt, 2015.